RENÉ MAGRITTE

Ya conoces lo que es y qué significa el surrealismo. Sabes que los pintores de este estilo reflejan en sus cuadros elementos reales pero en situaciones absurdas, en coexistencias imposibles, flotando, etc. Es como si el mundo de los sueños, con sus extravagancias y originalidades fuese llevado al lienzo haciendo gala de una imaginación sin límites.

El surrealismo utiliza un dibujo muy marcado y unos colores brillantes. Pinta figurativamente los objetos de forma que sean inmediatamente reconocibles, pero algo en estos cuadros nos llama la atención por lo infrecuente, absurdo, incoherente o imposible. También es normal que nos sintamos algo intranquilos e inquietos al contemplar estas obras ya que el mundo que representan se escapa muchas veces de nuestra comprensión y nos hacen tener ese temor por lo desconocido e inesperado que como seres humanos poseemos.

René Magritte es un destacado pintor surrealista belga que, además de cultivar las características surrealistas citadas, utiliza situaciones sorprendentes y contradictorias, mostrando una gran preocupación estética no exenta de un cierto sentido del humor, en ocasiones ciertamente satírico e incluso macabro.

En esta exposición mostramos tres obras de este pintor surrealista, que, al igual que Salvador Dalí, Chirico o André Breton cultiva un género muy sugerente e interesante.

LA OBRA MAESTRA O LOS MISTERIOS DEL HORIZONTE.

LA OBRA MAESTRA O LOS MISTERIOS DEL HORIZONTE.

Tres hombres o uno solo, visto desde tres diferentes ángulos y con una luna creciente sobre sus cabezas. Se trata de un atardecer y el personaje masculino, aislado, pensativo y distante aparece rígido y estático, como si se tratara de un muñeco, con una cara inexpresiva, como de cera, y nos hace pensar sobre qué sentido tiene todo esto. Tres lunas y tres hombres, totalmente iguales; soledad y misterio; claridad y oscuridad. La interpretación queda así abierta y Magritte sólo nos sugiere un campo de posibilidades para que nosotros busquemos explicaciones, si es que podemos.

LA CLARIVIDENCIA.

LA CLARIVIDENCIA.

Este cuadro es realmente curioso. Un pintor está en pleno esfuerzo pictórico inspirándose en un huevo que está sobre la mesa. Hasta aquí todo normal pero resulta que lo que aparece en el lienzo no es el huevo sino un pájaro volando. No sabemos que pasa, tal vez el pintor se adelanta a los acontecimientos, o su inspiración es sólo parcialmente pintada, o la escena busca la provocación del absurdo...

Por lo demás, dibujo nítido, cuidado claroscuro y colores definidos caracterizan este y todos los cuadros de Magritte.

EL IMPERIO DE LA LUZ.

EL IMPERIO DE LA LUZ.

Maravillosa propuesta lumínica la de este cuadro, tal vez el más conocido de este pintor surrealista del siglo XX. Resulta muy curiosa la profunda oscuridad de bosque, estanque y casa mientras el cielo se presenta claro y luminoso. La bella mansión tiene cerradas sus contraventanas salvo en dos ventanas del primer piso a la izquierda, pero el mayor impacto luminoso corresponde a la farola, que solitaria y aislada, rompe la oscuridad permitiéndonos ver la fachada y su reflejo en el estanque. El cuadro nos infunde una sensación de misterio y fantasía muy sugerente.